Thursday, September 23, 2010

Miércoles V

Una conclusión: La civilización sin elegancia y sin la sutileza del arte es una mancha gris violentamente ordenada.

Veo la ciudad. Veo caos. Veo un humanero (término análogo a gallinero) alborotado, donde todos corren sin saber realmente por qué. Gente que está cansada. Presión y estrés constante.


Vialidades con obras y más obras que no solucionan nada, cuando lo que se necesita son soluciones elegantes e inteligentes. Ingeniería artística. Sin estos elementos la civilización crece... a lo pendejo (como diría el tío de un amigo). ¡A lo puro pendejo! (como concluirá aquel que observe esta caótica ciudad). Es una mancha gris violentamente ordenada, creciendo, como un tumor... 
Cada vez estoy más convencido de que un día será demasiado tarde. Todo saldrá de control y nos lamentaremos por no haber hecho nada. Nos lamentaremos por haber cerrado los ojos ante la problemática actual.

Pocas personas detienen, aunque sea por unos instantes, la terrible inercia en la que vivimos inmersos y se cuestionan verdaderamente si existirá una manera mejor de vivir. Poca gente se sale del río de mierda en el que vamos los humanos, porque la mierda es calientita. Lo más difícil es, una vez afuera, aprender a vivir con el frío, resistiendo la tentación de zambullirnos de nuevo.

Mientras vivimos en piloto automático, vamos tomando las mismas decisiones una y otra vez. Nuestras vidas son una auténtica rutina. ¿Quién dijo que así debíamos vivir? ¿Recuerdan la historia del elefante y la estaca? ¿Qué es lo que nos da miedo? ¿Por qué titubeamos tanto para cambiar? La fuerza y el poder están en el momento presente.

¿No te cansa que tu vida sea tan pinche igual todos los días? Disculpen las palabrotas pero hay que saber cuándo usarlas.

Hay que vivir de actuar. No de pensar en actuar e imaginarnos qué pensaremos cuando hayamos actuado. 
El mejor momento para plantar un árbol fue hace veinte años. El segundo mejor momento es HOY.

No comments:

Post a Comment